Montserrat Camacho, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se encuentra actualmente realizando una movilidad bilateral en la Universidad Europea del Atlántico (Uneatlantico), donde cursa la carrera de Administración y Dirección de Empresas ( ADE). El pasado mes de noviembre tuvo la oportunidad de visitar la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Torremolinos (ACET) Málaga, una oportunidad que se dio gracias al acercamiento de UNEATLANTICO a congresos que permiten a los estudiantes conectar con profesionales de su área de interés.
Durante el Foro Iberoamericano de Estrategias Comerciales Urbanas, Montserrat conoció a los miembros de ACET y, con el objetivo de aprender sobre las estrategias que impulsan el comercio en otras localidades de España, decidió acercarse a la Asociación. Esto fue especialmente relevante para ella, ya que en el futuro desea trabajar en una asociación similar o contribuir a la promoción de PYMES en México.
Uno de los mayores retos para Montserrat fue viajar sola por primera vez. Gracias al apoyo de su familia y su universidad, este viaje no solo le permitió conocer más sobre Andalucía y su rica cultura, sino que también le brindó la oportunidad de acercarse a una empresa que se dedica a promover y mejorar el comercio local, un campo en el que le gustaría desarrollarse profesionalmente.
Al llegar a Torremolinos, fue recibida calurosamente por Irma Gambero, gerente de Torremolinos Abierto y ACET, así como por todo el equipo de la Asociación. Montserrat quedó impresionada con el trabajo que realizan, especialmente con programas como «Ser reyes por un día», en el que los clientes que compran en los comercios asociados tienen la oportunidad de ganar hasta 10,000 euros para gastar en esos mismos comercios. La forma en que la Asociación difunde estas iniciativas, con eventos públicos y la cobertura mediática de los ganadores, la inspiró profundamente.
La experiencia no solo le permitió aprender de los programas comerciales, sino también explorar más de Andalucía, una región que la cautivó por su cultura, historia y gastronomía. En particular, destacó la belleza de la Alcazaba de Málaga, la vibrante música flamenca y los sabores locales.
Para Montserrat, esta experiencia ha sido una gran lección sobre la importancia de buscar oportunidades y acercarse a ellas. Su viaje, tanto personal como profesional, le ha permitido adquirir valiosas ideas que en un futuro espera implementar en México para apoyar el crecimiento de las PYMES y tener un impacto positivo en su comunidad.