Entre los principales rasgos de la Universidad Europea del Atlántico destaca, sin duda, su carácter internacional, que se refleja en las aulas con la presencia de estudiantes procedentes literalmente de medio mundo. Esta característica genera un efecto muy positivo sobre el aprendizaje.
En este caso, hemos recogido los testimonios de un grupo de alumnos procedentes de Honduras que cursan los grados en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, Nutrición Humana y Dietética y Ciencia y Tecnología de los Alimentos, para conocer algunas de sus vivencias en la ciudad de Santander y en el campus de UNEATLANTICO.
José Jorge Kattan, estudiante del grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, expone lo positiva que ha sido su experiencia hasta el momento. Respecto a la Universidad, José Jorge expresa su agrado “por la variedad de gente y de culturas, creando así un ambiente internacional”. Asimismo, también le encanta la ciudad de Santander, ya que tiene una “gran variedad de sitios que visitar, en los que se incluyen varias playas, que, aunque claras y bonitas, son algo frías”. En cuanto a sus profesores, les califica como personas “muy completas y expertas en su área, con los que puedes aprender no solo dentro de clase, sino también fuera”.
Por otro lado, Mirian Celeste Robles, estudiante de Nutrición Humana y Dietética, explicó cómo fue su experiencia nada más llegar a Cantabria pues venía sin ningún conocimiento previo sobre la Comunidad. “Solamente volé, y aterricé encontrándome con un ambiente muy agradable, rodeada de amistades, buenos maestros y una buena institución, la cual me proporciona la mejor educación a la que podía haber optado”. Los profesores le han resultado “muy atentos, apasionados por su trabajo y bien preparados”. Lo que más le está gustando de esta experiencia son “las prácticas profesionales, ya que son muy adecuadas a la carrera y además son muy divertidas porque puedes encontrarte con lo que estás estudiando y lo que quieres hacer en un futuro con tu vida profesional”.
Por último, Carlos Andy Bernárdez, estudiante del grado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos, también nos cuenta cómo está viviendo su experiencia. Decidió venir a España para “formarme universitariamente fuera de mi país, y así luego volver para aplicar los conocimientos adquiridos”. Esta, ha sido una manera de “darme cuenta de que el mundo es mucho más grande de lo que uno piensa”.
A pesar de llevar aquí dos años, al proceder de una cultura tan diferente, aún le queda más de la mitad del camino hasta la completa adaptación. Hasta entonces, las amistades y el entorno que ha generado a su alrededor es lo que le ayuda. “En Latinoamérica, el nivel de exigencia, tanto en los exámenes como en los contenidos era muy inferior, y aquí, además de tener que estudiar para la carrera, disfruto de una beca a cambio de la cual debo trabajar, pero no es problema ya que lo que hago es administrar bien el tiempo”.