Alumnos de UNEATLANTICO procedentes de Guatemala narran su experiencia en el campus de Santander - Vida Universitaria

Mi experiencia

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Alumnos de UNEATLANTICO procedentes de Guatemala narran su experiencia en el campus de Santander

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La Universidad Europea del Atlántico destaca por su alumnado internacional, reflejando así en cada una de las aulas una gran riqueza cultural. En esta ocasión, la Universidad ha propuesto a cuatro alumnos, concretamente guatemaltecos, tres de ellos estudiantes del grado en Ingeniería de las Industrias Agrarias y Alimentarias, y el otro, estudiante del grado en Ingeniería Informática, que compartan su experiencia.

Al inicio de una nueva etapa siempre hay ese miedo por lo que te vas a encontrar, y eso es lo que sintió Ana Cristina Lemus al llegar a Santander, pero poco a poco y con la ayuda de sus compañeros de Guatemala, con quiénes se complementó súper bien, crearon una gran familia. Más concretamente, la experiencia en la Universidad le ha servido como enriquecimiento en todos los aspectos; por otra parte, respecto a la ciudad, opina que es muy tranquila y pequeña, pero con gran variedad de ambientes y con la oportunidad de sentirse como en casa.

Desde que tenía 9 años quería vivir en España”, Ángel Roberto Meda, cuenta qué fue lo que le motivó a venir a estudiar a aquí y cómo está viviendo la experiencia. Desde que era niño y estaba en el colegio le atraía mucho la cultura española. Eligió UNEATLANTICO porque surgió la oportunidad de una beca a través de FUNIBER.

En cuanto a su primer día de clase, le resultó muy distinto, puesto que, a pesar de ya haber asistido a la Universidad, es totalmente diferente que en Guatemala, aquí “hay mucha cultura y aprendes también de otros países, y de nuevos profesores”. También dice que “es una gran experiencia en la que conoces mucha gente, viajas más, haces nuevos amigos y nuevos contactos para el futuro y tienes una visión diferente de cómo actuar como profesional en diferentes países”.

A pesar de todo lo bueno, también se presentan retos como la cultura, los horarios, y el ámbito familiar debido a la distancia. Respecto a su adaptación, el primer año le resultó el más complicado por las diferencias con su país, pero poco a poco y con la ayuda de amigos y profesores supo acostumbrarse a los cambios.

María Jiménez Amezquita, expresó que su experiencia en Santander estaba siendo bastante buena, considera que es una ciudad “chiquita pero cómoda y acogedora”. Además, le gusta que sea tan tranquila que “puedes estar a cualquier hora en la calle cómoda y tranquilamente”.

En cuanto a la gente que la rodea, no les califica cómo amigos, si no que considera que han creado tales vínculos que son como una familia. También ha tenido la oportunidad de conocer personas de otros países, enriqueciéndose de sus culturas y tradiciones.

Para concluir, explica que lo que más le gusta de los profesores, es que tienen una experiencia muy extensa, y a la hora de enseñar no expresan sólo los contenidos de la materia, sino que también de la experiencia que ellos viven a diario, dando la oportunidad de ver como puede ser su futuro.

Por último, Juan René Ixcopal, alumno del grado en Ingeniería Informática, declaró que su experiencia en UNEATLANTICO está siendo muy grata ya que ha creado amigos de otros países, además el trato de los profesores hacia los alumnos le resulta agradable. A pesar de no tener amigos al principio, poco a poco la situación fue cambiando, conociendo también personas de otros países con sus respectivos idiomas y culturas. Al llegar a Santander le resultó difícil alejarse de su familia, cambiar el horario y hacer todo por uno mismo, pero en estos momentos ya está acostumbrado.

Ahora con el plan de mentorización para los nuevos alumnos que son de Latinoamérica u otros países, la situación considera que “es mucho mejor pues ayuda a adaptarse a la ciudad y al cambio brusco por la separación con la familia”.